A los 86 años, Carlos Timoteo Griguol, histórico entrenador de Ferro, Gimnasia y Rosario Central, entre otros, falleció esta madrugada en el sanatorio Los Arcos, de la Ciudad de Buenos Aires, debido a una afección pulmonar.
En los últimos días de su internación, el técnico argentino venía luchando fuertemente contra el COVID19 y además, desde hace un tiempo con el Alzheimer.
Se fue un emblema del fútbol argentino, quien durante los ochenta con su Ferro Carril Oeste Campeón y su Gimnasia de los noventa supo despertar admiración en todo el mundo del fútbol a partir de su enorme capacidad formadora, no sólo de buenos jugadores, más bien, de buenas personas.
Fue un entrenador que «obligaba» a los más jóvenes a terminar los estudios, no abandonarlos, sacar materias, previas, bajo la hermosa extorsión de que «si no la sacas a esa materia, no pienses en jugar en el equipo», o bien sus consejos de vida al jugador en la faz material, donde una casa, un departamento o un terreno significaban la mejor inversión para un muchacho que con tanta plata ganada de golpe por el fútbol piensa en lujos, autos, motos, entre otras cosas de la vida que se evaporan con el tiempo.
Pero Griguol dejó más, sin dudas. Gracias Maestro.